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Mi hijo no va a la guardería

Pasó la primera quincena de septiembre y con él la vuelta al cole y, para muchas familias, el momento de llevar a sus hijos por primera vez a la escuela infantil. He leído numerosos post sobre el período de adaptación, los problemas que surgen y cómo afrontarlos.

Me da que soy una de esas madres un poco «hippies» que aún da el pecho, duerme en la misma cama con el niño, pasea con él colgado como un monito y ahora no le lleva a la guardería. Se rumorea que cuando tenga 15 años seguirá durmiendo en nuestra habitación y merendará leche materna antes de salir a dar una vuelta con los amigos… ah, no, que será un antisocial por no haber ido a la escuela infantil

Dejando a un lado el humor quiero exponer aquí por qué mi hijo no va a la guardería y por qué pienso que con ello no le estoy negando nada vital para su desarrollo.

Si me lees y has llevado, llevas o vas a llevar a tus hijos a la escuela infantil este post no es una crítica a tu decisión, tan respetable como la mía, pero sí cuestiona algunas de las razones que se esgrimen para defender la necesidad de que niños de menos de 3 años acudan a ella.

Escuela infantil, no guardería

Aunque la mayoría seguimos hablando de «la guarde» a la hora de referirnos al lugar donde se lleva a los niños de 0 a 3 años de edad, es cierto que desde hace un tiempo estos centros intentan darse a conocer como «escuelas infantiles». Además no está bien visto eso de «guardar» a los niños

Una guardería es el lugar donde se cuida y atiende a los niños de corta edad (RAE), donde se deja a los niños más pequeños cuando la familia no puede hacerse cargo de su cuidado, principalmente por motivos laborales.

Me parece una puntualización innecesaria porque guardería y escuela infantil, en mi opinión, son lo mismo y no creo/espero, que lo que se hace hoy en la Escuela Infantil Garbancito (nombre ficticio) sea diferente a lo que se hacía en la Guardería Garbancito.

Socializar

Uno de los argumentos estrella a la hora de animarnos a llevar a nuestro hijo a la escuela infantil es que así aprenderá a socializar, relacionándose con otros niños y dándose cuenta de que no es el centro del universo.

Está demostrado que los niños no empiezan a socializar hasta más o menos los 3 años de edad y suelen tener un comportamiento centrado en sí mismos hasta aproximadamente los 6 años. Realmente el único vínculo necesario es el que establece con su madre, la persona que le ha cuidado y con la que, normalmente, más tiempo ha pasado. No necesita de otros niños para jugar ya que el juego seguirá siendo individual, no necesita aprender a compartir ni a convivir con otros niños.

A no ser que vivamos dentro de una burbuja y no nos relacionemos con nadie los niños están permanentemente rodeados de gente (abuelos, vecinos, los niños del parque), aprendiendo poco a poco que más allá de ellos, mamá y papá hay todo un mundo con el que relacionarse.

Estimular

En las escuelas infantiles hay educadores profesionales que saben cómo estimular y desarrollar las capacidades de los pequeños. Por supuesto, así tiene que ser y, desde luego, si yo dejara a mi hijo en una escuela durante varias horas cada día querría que dedicaran tiempo y esfuerzo a estar con él y aportarle experiencias positivas.

Pero mi hijo estando en casa recibe también multitud de estímulos y nuestra atención en exclusiva. No hay que olvidar que el ratio de cuidado en España es de 1:8 hasta los 12 meses y 1:12 a partir del año.

Inmunizar

Si le llevas a la guarde pasará las enfermedades infantiles ahora y se inmunizará para cuando vaya al cole.

Así que si no llevo a mi hijo a la escuela infantil no se pondrá enfermo, no se inmunizará y cuando vaya al colegio se pasará el curso en cama.

La inmunidad se desarrolla durante los primeros años y por muy limpia que tenga mi casa no puedo evitar que chupe el suelo, toque la suela de las zapatillas o se coma la tierra del parque.

Aún así en 13 meses no se ha puesto enfermo por lo que me parece que es bastante fuerte y sano, no le veo cogiendo todas las enfermedades de golpe cuando vaya al colegio.

Aprender

Aún no he conocido a nadie cuyos hijos hayan aprendido algo excepcional que sólo se enseñe en una escuela infantil. Mi hijo caminará, hablará, comerá con cubiertos y dejará el pañal igual que los que van a la escuela.

Ahora es tiempo de que se mueva, juegue y se asombre con todo lo que le rodea.

La escuela infantil no me parece negativa

Es una solución a un problema que no es de los niños ni de los padres sino de la sociedad y el modo de vida que se impone. Muchas familias se ven obligadas a dejar a sus hijos desde muy pequeños porque tienen jornadas laborales maratonianas y no pueden, o no quieren, depender de otros familiares.

No es sencillo conciliar trabajo y familia sin depender de terceras personas para el cuidado de los hijos. Esas circunstancias que obligan a trabajar para mantener una economía básica, no para lujos sino para subsistir, hacen muchas veces imposible quedarse en casa al cuidado de los hijos. Este es el gran problema y el gran error de nuestra sociedad. Personalmente he dejado mi trabajo fuera de casa prolongando una excedencia , lo que implica un sacrificio económico y profesional importante.

Si se diera el valor que tienen los primeros años de vida se promoverían las medidas necesarias para que los niños estuvieran junto a su madre y/o padre.

Como solución a esta circunstancia existen las escuelas infantiles y mejor estarán los niños en un lugar con profesionales cualificados y atentos que mal atendidos.

Lo que no puedo aceptar es que se me diga que mi hijo estaría mejor en «la guarde» que en casa. Ningún educador infantil, por muy vocacional, cariñoso y preparado que sea, va a igualar nuestra atención, dedicación y, sobre todo, no va a brindarle lo que más necesita, nuestro amor.

18 comentarios sobre “Mi hijo no va a la guardería

  1. Yo, he tenido a tres niñas y me siento al cabo de los años muy afortunada por haberlas tenido conmigo hasta que han empezado el cole. Porque todo ese tiempo , sus comidas y ese amor que yo les he dado no se los puede dar otra persona . Y hoy por hoy, tengo una Periodista, una criminóloga en la universidad y la pequeña. Eso no me lo quita nadie .

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  2. Estoy de acuerdo con lo que dices, aunque quiero añadir que en el tema de la inmunidad incluso hay estudios que dicen que realmente los niños no deberían ir a guarderías ni escuelas si en ese aspecto nos centrasemos porque su sistema inmune no está bien desarrollado y por lo tanto van a enfermar constantemente, contagiandose unos a otros. Mi regazo tiene un post muy interesante sobre este tema en el que lo explica muy bien, si quieres te puedo pasar el enlace. Es decir que no solo no es un argumento para llevarlos, sino que en ese caso sería más bien un argumento para no llevarlos. Si pensamos en su sistema inmune lo que deberíamos hacer es no llevarlos a la escuela hasta por lo menos los 6-7 años 😉

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    1. Me parece muy interesante lo que comentas. Realmente, pensándolo un momento, es totalmente lógico. El «problema» que nos encontramos a la hora de decidir llevar a los niños a la escuela es el efecto rebaño. Por mi esperaría hasta esa edad pero claro, igual cuando lo hiciera no tendría plaza en ningún colegio…

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  3. ¡hola! pues como en todo, para gustos colores, yo soy pro-guarde porque creo que mi hija ha aprendido allí más y mejor de lo que yo le hubiera podido enseñar, aunque también digo que le he llevado las horas mínimas imprescindibles por mi horario para poder pasar con ella el máximo de mi tiempo posible. para mi ha sido la combinación perfecta, pero eso, para mí. y cualquier otra opción me parece igual de buena, ¡sólo faltaba! ¡besos!

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    1. ¡Por supuesto! Como decía, no me parecen malas, al contrario, son una solución necesaria para muchas familias a la hora de conciliar (o intentarlo). La mayoría de peques, una vez hechos, lo pasan bien. Lo único que parece que es algo vital incluso pudiendo estar en casa y si no le llevas… uy, ¡a dar explicaciones! Ya sabes, los opinólogos crecen como las setas 😀 Besitos.

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  4. Así es, las escuelas infantiles son un problema de esta sociedad, en la que necesitamos de ellas para poder sobrevivir. Lo digo yo que mi princesa tuvo que ir y mi pequeño acaba de comenzar ahora y aunque no me puedo quejar de su etapa en ella, me hubiera gustado estar con ellos y no llevarles.

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  5. Hola:

    Amén. No puedo estar más de acuerdo.

    Yo también he escrito varias veces al respecto porque es algo que me da mucha rabia. Opino exactamente igual que tú y, sin negar el valor y la utilidad de la guardería y del trabajo de sus educadores y educadoras, me da pánico esa tendencia que percibo a dar por hecho que el único lugar en el que un bebé o un niño pueden desarrollarse correctamente es una institución de enseñanza.

    Hay padres para todos los gustos, y son muchos los que no están dispuestos a invertir el tiempo y el esfuerzo (mental y físico) que conlleva educar a un niño. Si vas a tener a tu hijo en casa para dejarlo aparcado viendo la tele, casi mejor que lo dejes en una escuela. Pero si te molestas en pasar tiempo con él, acompañarlo en su descubrimiento del mundo y aprender a su lado, que no me digan a mí que un adulto normal y corriente no tiene suficientes cosas que enseñarle a un bebé que acaba de llegar al mundo. Un mundo que, por cierto, está lleno de estímulos apasionantes y más que suficientes para esa necesidad de estimulación que tiene un bebé. Que cualquiera diría que si no se los estimula de una forma sistematizada se van a quedar faltos, madre del amor hermoso…

    Y me daría más igual si no fuera por la pena que me da ver cómo tantas familias se resignan a dejarlos allí con todo el dolor de su corazón como si no hubiera otra salida, cuando en muchos casos las hay, aunque sean intermedias. No me extrañaría que cualquier día se adelantara la edad obligatoria de escolarización en España teniendo en cuenta lo que presumen los políticos de la tasa de escolarización temprana de 0-3, como si fuera algo de lo que estar orgullosos el hecho de que tantos bebés se pasen horas lejos de su familia cada día.

    En fin, que da para mucho el tema, pero gracias por insistir en ello. Se puede criar en casa.

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    1. Hola Enrique! Muchas gracias por tu comentario, que comparto al 100%. Como dices, el tema da para mucho, empezando por la edad de escolarización, los 3 años, que a mucha gente le parece lo más normal del mundo sin ni siquiera saber que sólo es obligatoria a partir de los 6 años. Nosotros estamos planteándonos precisamente retrasar la escolarización de nuestro hijo y para ello puede ser necesario sacrificar y adaptar algunos aspectos, y es que ser padres implica sacrificar y priorizar.

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    1. Por supuesto, es una solución cuando no se puede estar en casa con ellos y normalmente los pequeños se adaptan. Pero de ahí a decir, como he escuchado, que es algo necesario o que, aunque tengas posibilidad de estar en casa con él debes llevarle por la socialización y otras razones…

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